P E R S P E C T I V A
Esta palabra ? te ha dañado más de lo que te imaginas, ha creado tantas depresiones y ansiedades en el mundo.
La vida tiene sus altas y sus bajas, momentos alegres y tristes, pero aún así, cada uno de nosotros la vemos de una manera completamente distinta.
Nos han vendido la idea de que a la gente buena DEBE irle bien en todo y que no debería sufrir, pero ¿qué sucede cuando a esa misma gente buena le va mal?
Comienzan a percibir un mundo malo, cruel e injusto, la percepción de lo que debería ser la vida perfecta cambia por completo. Desde que somos niños nos enseñan en casa que si nos portamos bien nos vamos a ganar un premio, si hacemos las cosas que mamá y papá nos dicen, nos van a amar.
Nos crean la falsa idea de que si te portas bien y haces lo que otros consideran bueno, la vida te recompensará y nunca sufrirás. Y vamos persiguiendo esa idea sin darnos cuenta del daño que nos hacemos.
Hoy vengo a decirte que la vida no es no como te la han contado, que a la gente buena también le suceden cosas negativas, y que también sufren. Esto no significa que seas una mala persona, que este pagando algún karma o que llegaste tarde a la repartición de felicidad.
La vida simplemente así es, me tomo tiempo hacer consciencia de esto; yo creía que la vida había sido demasiado injusta conmigo, que mis padres me traicionaron y me hicieron daño, que jamás tendría suerte en el amor y que para mi no estaba escrita una vida feliz.
Vivía desde el victimismo, creyendo que toda mi vida había sido mala, creé una perspectiva equivocada de mi realidad (MUY EQUIVOCADA), veía todo en blanco y negro, me enfocaba muchísimo en lo negativo de las cosas, casi creo que encontraba un problema para cada solución.
Después de todo el tiempo que estuve en terapia y sanando mi interior, pude cambiar esa perspectiva, ver una realidad completamente diferente.
La realidad era que la vida no me había quitado a mi familia, mis padres no me habían traicionado y mi pareja por amor propio, me cortó.
Durante mi vida pase por momentos tristes que me generaron sufrimiento, SI, pero lo que en realidad desencadeno mi depresión y ansiedad fue que me quede viviendo en ese sufrimiento, y lejos de que el tiempo curara mis heridas, las hacía más grandes.
Digamos que aprendí a ver la vida en blanco y negro, aprendí a ver sufrimiento en todos lados, aprendí que la vida era «injusta» y de tanto que me lo repetía mi mente se lo creyó y lo convirtió en mi realidad.
A todos nos pasan cosas buenas y malas, la diferencia es, ¿qué hago con esas experiencias negativas? ¿qué hago con mi sufrimiento?
Cuando aprendas a aceptar tu pasado, tus heridas y todos esos momentos difíciles que has tenido, comenzarás a ver las cosas diferentes y tu vida, se transformará.
Dile adiós a la depresión y ansiedad.